domingo, 11 de julio de 2010

El hijo que no.

Vino a nacer al mundo un día
y ese día
el mundo estaba oscuro
oscuro. De una oscuridad sin nombre que decía
muerte
y no llegó a nacer. Del todo
a ver la luz. Del día
lo negro, de las calles
el barro
qué grita desde el tiempo
tragó sus ojos
aun impronunciados
su cuerpo nunca visto
sus manos sin manos imperfectas piernas
y todo eso
que no.